Consiste en la transformación de una solución líquida en un aerosol de finas partículas que serán inhaladas y depositadas sobre el epitelio del aparato respiratorio. Esto permitirá mejorar la movilización y la evacuación de las secreciones respiratorias.  

Dentro de las indicaciones principales están:  

 

  1. La administración de un fármaco a un paciente con algún compromiso respiratorio 
  2. Fluidificación de secreciones bronquiales secas difíciles de expectorar 
  3. Humidificación del oxígeno administrado  

 

Para nebulizar en casa se deben tener claros los materiales para llevar a cabo el procedimiento, y las instrucciones claras de preparación; en general, se necesita de una cámara de nebulización, es decir, el nebulizador propiamente dicho, donde se introduce el líquido a nebulizar para generar el aerosol, una fuente de energía que haga funcionar el nebulizador (compresor), la pieza bucal o la mascarilla nasobucal, el fármaco a nebulizar, dosis y frecuencia de administración, el tipo de solución en la que será preparada (suero fisiológico y/o agua destilada) y el volumen en el que debe disolverse. 

En lo posible se debe inhalar y exhalar aire lenta y profundamente, sin embargo, esto en los niños puede ser complicado.  

Es importante que como cuidador te sientas bien entrenado en el procedimiento y resuelvas todas tus dudas con un profesional antes de realizar la nebulización en casa.  

 

En situaciones puntuales pueden aparecer efectos no deseados, pero, en general, se trata de un método terapéutico seguro. Usados en forma adecuada y con adecuado entrenamiento, las reacciones adversas de los medicamentos empleados en este tipo de terapia son mínimas y reversibles en la mayoría de los casos. 

 

A los niños les puede dar miedo el dispositivo o puede que no estén quietos durante el tiempo de la nebulización.  

Algunos consejos para que las nebulizaciones resulten más sencillas y para que sean efectivas son:  

  1. Quitar los miedos: intenta ponerte tu primero la mascarilla (ó a algun peluche) para que vea que es seguro.
     
  2. Permite que elija donde sentarse, y que sea un sitio cómodo donde diariamente se realice la nebulización.
  3. Que se vuelva una rutina, puedes ponerle un nombre divertido al momento. Intenta que sea a la misma hora.
  4. Personaliza el equipo con adhesivos o una prenda de vestir para la fuente de energía, de modo que se convierta en un personaje especial. 
  5. Si el bebe es muy pequeño y se mueve mucho, intenta realizar diferentes actividades que consuman energía para luego hacer la nebulización mientras duerme.
  6. Para los niños más grandes, intenta involucrarlo en la preparación, esto les da una sensación de orgullo y de logro. 
  7. Asegura que la nebulización sea efectiva, recuerda ajustar la mascarilla a la cara. Idealmente no debe estar llorando o hablando durante la nebulización.  

 

Por último, recuerda la retroalimentación positiva, elogia siempre por el trabajo bien hecho y dale alguna recompensa por su cooperación. ¡El refuerzo positivo tiene grandes beneficios para los niños! 

Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.